Rincón de Soto padeció el jueves, alrededor de las cinco y media de la tarde, una tormenta acompañada de granizado por la que, en poco más de un cuarto de hora, muchos frutales de esta localidad riojabajeña sufrieron importantes destrozos en su cosecha e, incluso, en su propia planta.
Se esperaba que algo así pudiera pasar. La Agencia Nacional de Meteorología alertaba de fenómenos adversos en altos niveles de riesgo por tormentas y granizo; pero poco o nada se puede hacer cuando los fenómenos meteorológicos la emprenden con nuestras huertas y dan al traste con el trabajo, inversión e ilusión de nuestras gentes del campo.
Las tierras afectadas con mayor gravedad fueron las situadas al noroeste de la localidad ya que, el recorrido de la nubada fue de la nacional 232 hacia el Ebro; mientras que los términos más perjudicados fueron Escobar, Palomar, Olivar, vadillo, Pontigon Plana, Recueja, Ramillo, Martín Grande, Cáscaras…
La cosecha de los productos frutales típicamente veraniegos, como melocotón, nectarinas, paraguayos o albaricoques, fueron extraordinariamente golpeados por la tormenta y la piedra; así como las peras de Rincón de Soto, producto estrella y emblema de esta zona, y alguna viña.
En los próximos días, estos cultivos serán tasados por los técnicos de Agroseguro, aunque se estima que el porcentaje de daño pueda encontrarse entre el 70 y el 100%
Además, este varapalo no lo será solo por perdida cosecha de este año ya que se prevé que pueda verse afectada la cosecha del años que viene, una vez que la virulencia de este fenómeno metereológico produjo que muchos árboles quedasen desvestidos de hojas y ramas de producción.
Los aqricultores rinconeros, deberán trabajar más si cabe, para levantar esta situación y encarar su futuro.