A las 10:40 llamaban a Concejo. Posiblemente ese haya sido el momento de mayor incidencia de una incómoda tormenta que durante estos días ya se esperaba pero que nadie deseaba que te llegara hoy.
Desafiando a la lluvia, la corporación y otras autoridades han salido a la calle camino a la Redonda. Ese y ahí iba a ser el momento determinante. Salir a la calle con las peanas o no.
La bandera, otra de las grandes protagonistas de la jornada, bien enfundada, no temió salir a la calle y Pablo Hermoso de Mendoza la asió firmemente a la salida del consistorio.
Pasadas las 11:15 la lluvia aminoró. Seguían escapándose del cielo, eso sí, algunas gotas. La incertidumbre continuaba. Salir o no. Salir, es la cuestión.