Por Maru Ortega| La primera vez que coincidí personalmente con Concha Andreu fue tras un equívoco en un Pleno en el Parlamento de La Rioja. Una tontería, un malentendido sobre el que la ahora presidenta del gobierno de La Rioja, de forma rauda, pidió disculpa sin buscar un pero, una justificación o, tan sólo intentar excusar parte de su acción.
A fin de cuentas, Andreu actuó #DeOtraManera. Diferente a la que acostumbrábamos a ver y a lo que, ojo, otros políticos desde su extrema soberbia nos siguen mostrando cada día.
Puede que por ello resulte tan ridículo e insultante ese intento de algunas formaciones políticas de engañar al electorado repitiendo, día tras día, un mensaje que nada se ajusta a la realidad; como si creyeran que repitiendo una mentira cada día, los ciudadanos terminarán creyendo esa falacia sin ser capaces de observar la realidad. Tal vez, por ello, resulta tan extraño como ridículo ese intento de vendernos cada día a una Concha prepotente o soberbia.
Celeste Barber es una actriz australiana que, a través de sus redes sociales, realiza de una manera fresca y diferente parodias de posados de “celebrities” e “Instagramer”. Recuerdo como, en una ocasión, hablando de esta australiana Concha Andreu me decía “me la pido como amiga”. Pues, a mi, con Concha, por esa frescura, esa rápida reacción ante todo, ese siempre saber hacer, saber estar y decir, esa verdad, esa cercanía y esa naturalidad innata a ella me pasa lo mismo: me la pediría como amiga.
Es verdad que un amigo siempre dice que el mayor mal de un políticos es llegar el cargo en si. “Todos los que pisan alfombra, en cuanto la pisan, cambian”. Esperemos que en el caso de Andreu no sea así.
Sea como fuere, hoy, Concha Andreu ha tomado posesion como la primera presidenta de La Rioja. “Menuda…”
Sin embargo, parece que no van a ser tiempos fáciles. La carga de la consecución de los fines no será exclusivamente suya y en ella también influirán las personas designadas, personas que no siempre estarán elegidas por ella, para realizar este camino. Lo que es impensable y no sería permisible es que esos peajes condicionaran el resultado.
Decía Lucia Etxebarria en su “Beatriz y los cuerpos celestes”, novela que le valió a la escritora para lograr un premio Nadal, que “en la vida todos los pasos de lo posible están abiertos a la senda de lo real. Sin embargo, no todos somos tan sabios como para comprenderlos ni tan audaces como para trazar un itinerario”. Por suerte, a Andreu le sobran estas dos virtudes y; aunque seguro que muchos intentarán hacerla tropezar, sin valorar que sus tropiezos serán los de todos los riojanos; a buen seguro que la calagurritana sabrá esquivar las zancadillas y obstáculos y hacerles frente.
Empieza una nueva etapa para La Rioja. El tiempo dirá si fructífera o no. A algunos les gustará más y a otros menos; pero lo que todos tenemos que tener claro es que lo importante es el bien común, lo mejor para La Rioja y, desde su forma de entender las cosas, si algo tengo claro es que Concha lo tiene claro: La Rioja, lo primero. Como decía Ray Loriga “Olvídate del mapa; pero no te olvides del tesoro”. Habemus presidentam y esta es Concha Andreu.