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El día que vivimos peligrosamente (en FITUR)

Llegamos a FITUR en plena crisis del taxi, sin tener muy claro si conseguiríamos entrar a FITUR o la situación se recrudecería.

Desde el Gobierno de La Rioja todo estaba preparado. Un autobús recogía a los pasajeros a la salida del aeropuerto y los trasladaba a FITUR. La rotonda tantas veces vista estos días en la TV estaba tomada por policías que no dejaban a que ningún taxi impidiera el acceso; así que, en un abrir y cerrar de ojos, estábamos en IFEMA.

Nos encaminamos al stand de La Rioja y allí nos espera la sala de prensa en la que todo responde a la perfección hasta que intentas usar la wifi saturada o intentas descolgar un abrigo del perchero y este se desmonta pieza a pieza.

Llega el Presidente comienzan las declaraciones y los anuncios. Destaca el milenario del nacimiento de Santo Domingo con su año jubilar y la primera feria de Turismo de La Rioja. Diego Ubis que viaja a Madrid con los medios de prensa informa de que quiere hacer declaraciones después. Pero los medios están más preocupados de grabar como el anfitrión observa el stand, saluda y toma una copa de vino que de lo que el portavoz naranja pueda contarles.

Viene Pablo Casado. Ahora sí que no hay declaración que valga ni brindis qué interese.

El foco informativo recae en el joven líder de la formación popular. Larga espera hasta la llegada de Casado y, después, todo sin prisas. Prisas por entrar, prisas por saludar, prisas por elegir un sitio para La foto. “No esté no, mejor otro.” Foto, saludo y, de nuevo, para fuera. Espera, aún no, mejor le regalamos una botella de vino. Foto posando con la botella de vino.

De nuevo para fuera. ¿Y si brindamos? Foto brindando. “Oye, ya vale” espeta alguien de un gabinete “que ya se ha hecho la foto brindando” y Casado parte hacia Melilla. Hacia el stand de Melilla, vamos. ¡Anda, mira, si está la ex Ministra Tejerina! Pues sí, había llegado con Casado pero entre tanta vorágine nadie la había detectado.

Y siguen las visitas “¿a estos que posan con Ceniceros no les habíamos hecho una foto ya antes?” Pues no “aunque parece un déjà vu estos son nuevos”. Pues más fotos, más brindis… “¿Y estos quienes son?” A alguien le suena ella “sí, ¿no es Díaz Ayuso?” Pues sí, son los candidatos a la comunidad y a la alcaldía de Madrid. Toca sacar los móviles y ‘googlear’ “candidato ayuntamiento Madrid PP” ¡Martínez- Almeida!

Camino a la calle para fumar, un astronauta en Cantabria sorprende a los visitantes, tras él, una cuenta atrás.

Y llega la calma y el protagonismo lo retoma la sala de charlas y presentaciones hasta la hora de los canapés. Entonces sí que la zona de La Rioja se colapsa de propios y extraños intentando pillar un bocado y es difícil mantener llena la sala de presentaciones.

Se acaban los canapés y regresa Ceniceros a la sala de presentaciones. Turno de Coloma que trae novedades para La Rioja Bike Raid. El Presidente y la Consejera salen corriendo y el Director General de Deportes tiene que asumir el peso de la presentación saliendo airoso al paso de lo que le acababa de caer.

Y llega Germán Cantabrana directo de Cuba. Saluda, habla, se hace fotos y aprovecha para comer justo antes de salir hacia Barcelona.

La sala de exposiciones continúa con las presentaciones y con el público turnándose para no dejarla vacía.

Y, cuando la expedición estaba a punto de salir, por fin llega la presentación turística calagurritana con pocos medios y público para asistir a ella debido al horario establecido. Sala vacía, toca volver a llenarla. A pesar de ello, los periodistas de Calahorra intentamos estar al menos un rato. Y vuelta al aeropuerto con la tranquilidad de saber que se va con tiempo y que los taxistas no parece que vayan a aparecer en nuestro camino.

Y, claro, lo de la tranquilidad no era cosa de este viaje. Ahora el problema se planteaba en si podremos aterrizar ya que el nivel del Ebro acecha peligrosamente el aeropuerto que corría peligro de inundación. Además, nuestros coches estában allí, con lo que la incertidumbre es doble. Con retraso salimos de Madrid sin saber dónde terminaríamos aterrizando.

Y, de la misma manera que ocurría a la ida con los taxistas, los alarmismos que vaticinaban hoy un aeropuerto inundado (los mismos que la semana pasada vendían una Rioja bajo la nieve) volvían a mostrar que su alarmismo tendría buenos resultados en lectores; pero cero en realidad.

FITUR continúa y el próximo año la expedición de periodistas regresará a fotografiar políticos mientras seguiremos observando cómo cada stand se presenta a sí mismo sus propuestas turísticas año tras año.

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