El CD Calahorra se hizo ayer con el IX trofeo de la seta y el champiñón de Pradejón en los penaltis. No fue un partido muy vistoso, ya que ambos equipos estuvieron muy plantados en el campo sin conceder a penas ocasiones de gol; pero sí que los rojillos y los burgaleses dieron una muy buena imagen durante el partido.
Los goles de ambos equipos se produjeron en la segunda parte. Tras la lesión del portero rojillo Gonzalo Gómez, que cayó al césped tras un encontronazo con el delantero local, llegando a perder durante tres angustiosos segundos el conocimiento; llegaron los goles.
Mientras Gonzalo, ya sustituido por Gorka Alegría, estaba siendo atendido en la banda, llegó el gol de Elliot Gómez que muchos rojillos se perdieron, más pendientes de la banda y preocupados por el estado de Gonzalo que del partido. Mientras Gonzalo abandonaba el campo, camino del hospital, donde se le realizaron distintas pruebas; llegó el gol del CD Calahorra. Samuel Obeng, en la segunda que tuvo en el partido, introdujo un balón suelto en él área dentro de la portería tras la salida de un córner.
Y de ahí, a los penaltis. 5 lanzaron cada equipo. Por los rojillos tiraron y marcaron Rodrigo, Gabri Ortega, Parla, Auzmendi y Samuel Obeng y sólo, el quinto penalti que se estrelló en el palo, dio ventaja a los rojillos en el marcador, proclamándolos campeones del trofeo.
A última hora de la noche, el CD Calahorra anunciaba en un tuit lo verdaderamente importante del partido, que Gonzalo estaba bien y que todo había quedado en un susto.
Nuestro portero @Gon1423 ya ha recibido el alta del hospital tras las pruebas realizadas y pasará la noche en casa. 👏🏼👏🏼👏🏼
— CD Calahorra (@cdcalahorra) August 15, 2018