Todo comenzaba un 23 de julio, fecha en la que la UD Logroñés Promesas comenzaba sus entrenamientos en el Mundial 82. Se daban cita en las instalaciones logroñesas un grupo de chavales jóvenes con ganas de demostrar. Una parte eran jugadores renovados de la temporada anterior, otra, jugadores en edad juvenil que iban a disputar gran parte de la pretemporada con el filial blanquirrojo, y los fichajes, la mayoría de ellos con pasado en grandes canteras del panorama futbolístico español.
La pretemporada del conjunto dirigido por Josean García transcurría con total normalidad: probaturas ante equipos de la misma categoría y foráneos y minutos para todos los jugadores para coger sensaciones.
El 12 de agosto, los blanquirrojos tenían su primera “prueba” importante de la pretemporada. La UD Logroñés Promesas se medía al Náxara CD en La Salera. Tocaba disputar la primera ronda de Copa Federación. Los visitantes caían derrotados por 4-1 en el primer partido oficial de la 18-19, pero pese al abultado resultado, las sensaciones eran buenas para afrontar lo que venía.
Comenzaba lo bueno, la liga. Tocaba visitar San Roque en la primera jornada, al CD Agoncillo, equipo que iba a perder la categoría al final de temporada. Se ganaba 0-2, pero no sin sufrimiento. Pese al buen inicio del filial tras ganar al conjunto avionero, no iba a tardar en llegar el primer bache de la temporada, ya que en las dos jornadas siguientes se perdía ante SD Oyonesa (0-1) y Yagüe CF (1-0) respectivamente.
La reacción blanquirroja iba a aparecer. A los siete días del tropiezo ante el cuadro amarillo, la dinámica cambiaba tras vencer a un CD Pradejón que visitaba el Mundial 82 con pleno de victorias y en segunda posición (1-0). En esas fechas, Pablo Bobadilla y Juan Iglesias dejaban de jugar con el Promesas y pasaban al primer equipo. Por otra parte, jugadores como Juanjo Gómez, Adrián Ruiz o Jorge Olarte comenzaban a entrar en escena para Josean García.
La victoria ante el CD Pradejón parecía dar alas a los logroñeses, ya que en las semanas siguientes se conseguía ganar a grandes equipos de la categoría como la SD Logroñés (2-3) o el River Ebro (5-2) con Ali en plan estelar.
Antes de volver a encadenar una inmensa racha, la UD Logroñés Promesas perdía algo de fuelle tras dejarse puntos ante FC La Calzada (2-2), CD Anguiano (0-2) y CD Berceo (1-1). Pese a ello, los puestos de Play Off se situaban a tan sólo tres puntos.
Los próximos partidos que iban a disputar los del Mundial 82 iban a saldarse con victorias ante equipos de la zona baja y el CD Varea, que no atravesaba un buen momento. El Promesas iba con paso firme hacia el playoff de ascenso.
El final de la primera vuelta no iba a ser el mejor y los del Mundial 82 se alejaban de los puestos de arriba tras perder ante el CD Alfaro (0-1), empatar en Sendero ante el CD Arnedo (1-1) y perder ante el líder, el Haro Deportivo (0-1). Pese a lograr una victoria de prestigio en La Salera ante el Náxara CD (0-1) y vencer al CP Calasancio (3-0), los blanquirrojos terminaban la primera vuelta sextos con 36 puntos, fuera de los puestos de playoff.
La segunda vuelta iba a comenzar de una manera algo irregular para el Promesas, con victorias ante el CD Agoncillo (2-0) y SD Oyonesa (1-2), pero también con algún traspiés sufrido como ante el Yagüe CF (0-1) o CD Pradejón (3-2).
De nuevo, y al igual que sucediera en la primera mitad del campeonato, la UD Logroñés ponía la flechita para arriba tras vencer de nuevo a la SD Logroñés (2-1) y al River Ebro (1-2). Ésta última victoria iba a suponer mucho, ya que se ganaba el el average a un equipo que iba a estar luchando con los de Josean por una plaza en el Play Off.
En la jornada 28, el equipo logroñés se instalaba en los puestos nobles de la clasificación a costa de un River Ebro que no venía en buena racha. Por su parte, el filial había cogido confianza tras remontar un 0-2 al CD Berceo y terminar ganando 3-2 y vencer en el siempre complicado campo de Isla ante el CD Anguiano (0-1).
Pero la alegría en el Play Off durante esa época iba a durar poco, tras el empate ante el CF Rápid en El Rozo (0-0), y hacer los deberes el River Ebro y el CD Anguiano.
La semana siguiente, el Promesas goleaba al Vianés (7-1), pero volvía a dejarse puntos a domicilio, ésta vez en el Municipal ante el CD Varea (1-0). Quedaban siete partidos y la cuarta plaza, marcada por el River (63), estaba a cuatro puntos, mientras, el Promesas estaba quinto (59), por detrás apretaba el CD Varea (57) y el CD Anguiano (56) bajaba el ritmo.
La derrota ante el equipo de la barriada hizo aprender y mucho a los de Josean, ya que los próximos partidos iban a ser todo buenos resultados para la UD Logroñés Promesas. Cinco victorias consecutivas, en campos complicados como La Molineta o El Mazo entre otros. En este tramo de la temporada, solo quedaba una plaza para dos equipos, el River Ebro o el Promesas. CD Varea y CD Anguiano estaban matemáticamente fuera.
El filial se situaba en puestos de Play Off con dos puntos de ventaja sobre el River Ebro, amén de las derrotas ante el CD Pradejón y la SD Logroñés de los rinconeros.
A falta de dos jornadas, el Promesas lo tenía de cara. Un buen resultado ante el Náxara CD ponía un pie en el bombo a los de la capital. Se empataba finalmente ante el conjunto de La Salera (2-2), mientras, el River hacía los deberes ganando in extremis al FC La Calzada en el descuento.
La cuarta plaza se iba a decidir en la última jornada, Promesas y River Ebro estaban empatados a puntos pero los blanquirrojos, al tener mejor average, tenían ventaja.
La última jornada liguera llega por fin. Todo está decidido, menos la cuarta plaza. UD Logroñés Promesas y River Ebro pugnan por un puesto y estar así en el bombo del lunes. CP Calasancio y CD Anguiano, jueces. Domingo 19 de mayo, el dís en que saldremos de dudas. Pero lo cierto es que el Promesas parte con ventaja.