Salió con otro aire la UD Logroñés, con un once y convocatoria en continuidad al legado de Sergio; pero con un esquema más definido. 4-4-1-1 con Caballero y Curro en la sala de máquinas y De Moraes con libertad en la media punta.
Poco duró el aire nuevo, tanto como duró el físico de los blanquirrojos, poco más de media hora. Y todo ello por delante en el marcador gracias a un gol del mediapunta brasileño en colaboración con el defensa maño. Así se fue al descanso con un gol a favor y un palo en contra. Con dudas en defensa y sin delantero centro.
La segunda parte no dio para mucho en lo futbolístico, pero sí en cuestión de polémica. Hasta 4 penaltis sancionables, dos por área. Especialmente claros y determinantes los cometidos por el Utebo, ambos con 1-0 en el marcador y que hubieran dejado el partido y el gol average cerrado para los de Yayo. Pero el árbitro (eibarrés) decidió no pitar los locales y si los visitantes. Los de Zaragoza anotaron el primero y Royo detuvo el segundo.
Con tablas acabó el partido que murió con un equipo tocado y sin punch y que deja (ver para creer) al transatlántico del grupo lejos del nuevo objetivo: Alcanzar como sea la quinta plaza.
Y para ello le esperan dos derbis consecutivos ante equipos que se juegan todo.
Sólo queda rezar, por que en lo que a juego se refiere…