Este fin de semana, agentes pertenecientes a la Brígida de Seguridad Ciudadana de la Jefatura Superior de Policía la Rioja, propusieron para sanción a siete jóvenes, una de ellos, menor de edad; por incumplir las medidas sanitarias establecidas, al celebrar una fiesta «ilegal», en una Bodega abandonada de la ciudad de Logroño.
Esta acción se enmarca dentro las intervenciones llevadas a cabo por la Policía Nacional de La Rioja en el cumpliendo la normativa establecida por el Gobierno de España y el de la Comunidad Autónoma de La Rioja, con el objetivo primordial de evitar que la pandemia provocada por el COVID-19 se propague con mayor intensidad entre los ciudadanos riojanos.
Celebración de una “Fiesta” en una bodega en ruinas.
Los hechos ocurrieron durante la madrugada del pasado fin de semana, cuando los agentes fueron alertados por la Sala CIMACC 091 (Centro Inteligente de Coordinación Mando y Control), ya que un ciudadano había comunicado que se escuchaban ruidos procedentes de un edificio abandonado.
Tras ello, los agentes de Policía Nacional se dirigieron hacia el lugar y una vez allí comprobaron que en el interior de una antigua bodega “en ruinas» un grupo de jóvenes estaban celebrando una «fiesta-botellon».
Las dotaciones policiales accedieron al interior de la bodega prácticamente derruida y de difícil acceso, debido a la situación de deterioro y los escombros que allí se amontoban. Una vez en el interior accedieron por una escalera a una de las plantas, donde se encontraban siete jóvenes consumiendo bebidas alcohólicas, sentados en colchones abandonados. Los jóvenes no llevaban mascarilla ni adoptaban ningún tipo de control sobre la distancia de seguridad sanitaria.
Los agentes procedieron a la completa identificación de los jóvenes, cuyas edades se encontraban entre, los diecisiete y veintiocho años de edad. Una de ellos, una mujer de diecisiete años de edad, fue trasladada a dependencias policiales donde fue entregada a su madre debido a su minoría de edad. Otro de los jóvenes, este mayor de edad, fue traslado también debido a que no poseía la documentación que le acreditaba con certeza su identidad.
Los jóvenes han sido propuestos para sanción por, al menos, tres motivos: encontrarse fuera de sus domicilios dentro del horario de limitación de movilidad nocturno, celebrar una «fiesta-botellón» consumiendo alcohol, además de por hacer reuniones de más de las seis personas, tanto en espacios públicos como privados, asimismo por estar ocupando un bien inmueble de titularidad privada.