La etapa riojana de la Vuelta ha sido la etapa de Primo Roglic que ha vuelto a hacerse grande en ella. El esloveno volvió a ganar en Moncalvillo, tal y como hizo en 2020, y logró hacerse con el mallot rojo de líder.
La tranquilidad, a pesar de que cuatro corredores lanzasen pronto una escapada, fue la la tónica general de esta hasta eel inicio de la ascensión a Moncalvillo. El pelotón dejó moverse a estos ciclistas en una escapada que no se veía peligrosa ni consistente.
Todo cambió cuando llegó el puerto riojano. Los Red Bull de Rogilc endurecían la carrera en los primeros metros del puerto, poniendo a los corredores en fila de uno. Aguantaban Carapaz y Eris Mas mientras que los corredores iban cediendo posiciones.
A poco 6 kilómetros la ruptura era total y solo tres corredores del equipo del Roglic, incluido el propio esloveno, eran capaces de seguir el ritmo.
Aleksandr Vlasov fue el último en aguantar el ritmo del ya líder virtual de la clasificación, que poco a poco iba ampliando las diferencias en solitario. Por su parte, Connors comenzaba a quedarse descolgado
A 4,3 arrancó desde atrás Carapaz, pero ya posiblemente siendo conocedor de que ya era tarde. A pesar de ello, el ecuatoriano buscó la etapa mientras Mas parecía quedarse definitivamente descolgado.
A 3,6 saltó el mallorquín de Movistar, tercero de la general. En la parte más dura de la subida, reaccionaba el español que buscó al escapado Roglic, el ciclista que ya había conquistado en 2020 este puerto.
Fue un espejismo. El ya maillot rojo apretó y, pedalada a pedalada, iba tomando segundos. Más y más. Por su parte, Eric Mas se veía superado y alcanzado por Gaudu y Skelmose que cruzaron la meta a 46 de ganador. $ segundos más se picaron a Mas.
Tras ello, siete segundos después, llegaron los otros españoles del top de la general: Mikel Landa y el maillot blanco, Carlos Rodríguez. Por su parte, O´Connors entró a casi dos minutos, pero mantiene la segunda posición.