Dos golazos, uno de Abel Bretones, al final del primer tiempo, y otro de Catena, al final del encuentro, fueron suficientes para que Osasuna remontara y ganara un encuentro que, según Bordalás, no mereció ganar.
Puede ser. O no. Pero dos son más que uno y Osasuna siempre buscó ese segundo que los azules, hoy vestidos de amarillo, solo buscaron no encajar. Porque sí, los de Lisdi fueron claramente a por el encuentro y hoy el fútbol ha terminado premiando a quien más lo ha buscado ganar.
El partido comenzó con la grada realizando acciones que pretendían llamar la atención con lo que está ocurriendo en Gaza. El lanzamiento de pelotas ee tenis al campo obligó a parar el encuentro al poco de iniciarse. Curiosamente y sin que lo ocurrido en el campo de El Sadar tuviera mucho que ver, en el descanso se conoció que el plan propuesto por Trump para el alto al fuego había sido aceptado por la última de las partes que debía aceptarlo, el grupo terroristas de Hammas.
Regresando al fútbol y el encuentro, en la primera parte, el Getafe marcó en la única de las que dispuso. Lo hizo Mayoral en el 23 convirtiendo desde el suelo en gol un pase exquisito de Luis Milla.
Bretones hizo lo mismo en la única de la que dispusieron los rojillos. Víctor Muñoz se la dejó al lateral en el pico del área grande y éste la elevó de un zapatazo que coló en la escuadra del segundo palo.
Poco más tuvo la primera parte en la que el Getafe se salvó de terminar con uno menos. Arbelos Rojas dejó en amarilla una entrada a la altura de la rodilla de Mario Martín sobre Torró.
En la segunda parte Osasuna buscó la victoria sin paliativos. Sacó a Rubén García que regresaba tras sus ausencias por motivos personales. Entró al campo por Torró. Después lo hizo Raúl García de Haro, un nueve, por Juan Cruz.
Osasuna se volvía más ofensivo. Con más voluntad que ocasiones y acierto fueron cayendo los minutos. Lo buscó Budimir. Lo intentó Raúl García pero David Soria metió una manopla salvadora.
Lo busco pero no lo terminaba de encontrar hasta que al borde del final Catena convertía el córner botado por Rubén García.
En el descuento Lisci realizó el último cambio. Sacó del terreno de juego a Rubén García, que salió ovacionado por el Sadar, e inteodujo a un refuerzo defensivo, Jorge Herrando. La última del partido fue visitante y obligó a Sergio Herrera a protagonizar otra de sus características intervenciones.
