El portero del Atlético de Madrid, Jan Oblak, ha logrado su sexto premio Zamora como portero menos goleado en La Liga por sexta vez. Ningún portero había conseguido levantar este trofeo en seis ocasiones.
Hasta hace unos días, el colchonero compartía este hito con Víctor Valdés que también había conseguido cinco trofeos Zamora. Ahora Oblak se convierte en el mejor portero histórico de la Liga española desde que se da este galarddón que lleva por nombre el de otro cancerbero de leyenda, Ricardo Zamora.
Único, histórico, irrepetible, leyenda🧤
Jan Oblak y sus 𝟔 𝐓𝐫𝐨𝐟𝐞𝐨𝐬 𝐙𝐚𝐦𝐨𝐫𝐚 🔝🏆 pic.twitter.com/AUJ6bvrYuE
— Atlético de Madrid (@Atleti) May 27, 2025
Oblak logró su primer trofeo Zamora en la temporada 2015/2016. En aquella campaña, el arquero atlético consiguió establecer un promedio de 0,47 goles por partido, encajando tan solo 18 en los 38 disputados.
Volvió a alzarse con este trofeo en la 2016/2017, 2017/2018, 2018/2019 y 2020/2021. En esta campaña su meta solo ha sido perforada en 30 ocasiones en los 36 partidos que ha jugado. El promedio del eslovaco ha estado en 0,83.
(Obi) Oblak, de 32 años, llegó al Atleti en agosto de 2014 procedente del SL Benfica. Su debut fue muy controvertido y sembró muchas dudas. Fue en Champions ante el Olypiacos y los madrileños cayeron en él por 3-2. Este partido relegó al banquillo, convirtiéndose en el suplente de Miguel Ángel Moya.
Hasta marzo de ese año, así continuó siendo. Pero, de nuevo, la Champions le dio una oportunidad. En la vuelta de octavos ante el Bayer Leverkusen se lesionaba Moyá y Oblak era el encargado de ponerse bajo palos
Todo cambió el 17 de marzo de 2015 en el partido de vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones. El Atlético tenía que remontar un uno a cero frente al Bayer Leverkusen y en el minuto 23 Moyá se retiró lesionado.
En aquel partido, los del Manzanares estaban obligados a remontar un 1-0. Mario Suárez logró el gol que mandaba el partido a la prórroga y a los posteriores penaltis.
El guardameta atlético realizó una gran actuación que culminó deteniendo un penalti a Çalhanoglu (luego los alemanes fallaron otros dos) y que le sirvió al Atlético de Madrid para avanzar a cuartos.
Ese encuentro erigió a Oblak en titular indiscutible bajo los palos del Atleti.