Lorena merece la pena

Lorena Pérez Alonso. Podríamos quedarnos ahí y tampoco pasaría nada; a estas alturas de partido su nombre -su balonmano también-  hablan por sí solos de un fichaje que genera ilusión, ganas, altas expectativas, así como un ‘bombazo’ deportivo que sinceramente no somos nosotros quienes vayamos a desactivar 😛

Pero como esto se trata de presentar a la jugadora en cuestión, y tampoco quiero guardármelo para mí (de verdad que no sabría cómo), os comentaré algún que otro dato de su trayectoria para que así podamos entendernos de una forma más ‘balonmanera’, querido y valorado lector 😉

La cosa es simple. Partiendo de los cimientos de la casa, de la ecuación de primer grado, o de la base de cualquier teoría, si hablamos de Lorena es hablar de Atlético Guardés -equipo del que procede- y de una capitanía que ha llevado -y en su momento se ganó- en el campo y, por lo que tengo entendido, también fuera de él.

Fin.

En verdad hoy estoy un poco hablador, también os diré (deberíais saberlo jeje) que es extremo izquierdo, tiene 31 años (la flor de la vida en esto llamado balonmano) y que cuando decide salir de fiesta por el avanzado o mixta suele ser ese típico amigo o amiga que llega un momento desespera; y sino que se lo pregunten a sus rivales mientras intentan llevar a buen puerto su ofensiva. Sin duda una buena comunión ataque-defensa que os adelantamos puede esta última (y para ser extremo) desarrollarla en el puesto de ‘dos’.

¿Más?

Venga va que la ocasión creo lo merece. Originaria de un pueblo de Vigo llamado Salceda de Caselas, se formó en su etapa juvenil en el Baixo Miño, pasó más de una década (donde coincidió con nuestra jugadora Carla Rivas) en el Balonmano Porriño con quien disputó varias fases finales de la Copa de la Reina, así como un ascenso a División de Honor que más tarde le condujo durante una temporada a la disciplina del SAR Rodavigo donde anotó 115 goles en 25 encuentros.

Totalmente recuperada de los problemas que acarreó esta reciente temporada en su rodilla y que le tuvieron dos meses y medio de baja, la jugadora gallega llega a La Rioja o en su caso más bien aterriza -lo de hacer el cabra (saltos interminables y esas cosas) tuve un día la grata oportunidad de comentarle se la da bien- con ganas de demostrar desparpajo desde un puesto que maneja con criterio y además garra.

Habitual (y mucho) en las convocatorias de la selección autonómica de Galicia, Lorena aporta en definitiva liderazgo, rapidez en el contragolpe, y definición pues amigos y amigas (y que no nos escuchen los rivales) las vaselinas veréis están a la orden del día 😈

¡BIENVENIDA, LORENA!