La Rioja pone en marcha la vacunación contra la gripe y el Covid de los mayores de 60 años
Ambas vacunas pueden recibirse a la par
El Gobierno de La Rioja ha iniciado hoy la campaña de vacunación simultánea contra la gripe y el COVID para la población mayor de 60 años y los grupos diana y profesionales sanitarios y socio sanitarios, en toda la red de Atención Primaria del Servicio Riojano de Salud, es decir, en todos los centros de salud y gran parte de los consultorios de la región.
La consejera de Salud, María Somalo, ha declarado que “en el escenario actual, con la incidencia de la COVID creciendo y la previsión de que la gripe sea de mayor virulencia, los riojanos y riojanas tenemos la oportunidad de volver a demostrar el compromiso que siempre hemos demostrado y lograr entre todos que nuestra comunidad alcance la cobertura vacunal de campañas anteriores”.
Para solicitar una cita, todos los usuarios del Servicio Riojano de Salud pueden hacerlo mediante la aplicación de Rioja Salud (cita con su enfermera para vacunación) y del teléfono 941 29 83 33, bien mediante Cita Previa (opción 1) o COVID Responde (opción 2). En el caso de los mutualistas serán vacunados en sus centros habituales de vacunación, no en el SERIS.
Desde este mismo lunes día 10 de octubre, el Servicio Riojano de Salud ha comenzado también la campaña de vacunación para todos los profesionales del entorno sanitario. En el caso de los trabajadores de Atención Hospitalaria se vacunan en el salón de actos del Hospital Universitario San Pedro y los profesionales de Atención Primaria en su propio centro de salud.
¿Quiénes se pueden vacunar contra la gripe?
La vacunación antigripal tiene como objetivo reducir la mortalidad y morbilidad asociada a la gripe y el impacto de la enfermedad en la comunidad, además de proteger a las personas más vulnerables a dicha enfermedad, para disminuir la incidencia en estos grupos y contribuir a reducir el impacto sobre la presión asistencial.
Además de los mayores de 60 años, también podrán vacunarse contra la gripe las personas menores de 60 años de edad de los grupos diana, con estas patologías:
– Enfermedades crónicas cardiovasculares, neurológicas o respiratorias, incluyendo displasia bronco-pulmonar, fibrosis quística y asma;
– Diabetes mellitus
– Obesidad mórbida (índice de masa corporal ≥40 en adultos, ≥35 en adolescentes o ≥3 DS en la infancia)
– Enfermedad renal crónica y síndrome nefrótico
– Hemoglobinopatías y anemias
– Hemofilia, otros trastornos de la coagulación y trastornos hemorrágicos crónicos, así como receptores de hemoderivados y transfusiones múltiples
– Asplenia (ausencia del bazo) y disfunción esplénica grave
– Enfermedad hepática crónica, incluyendo alcoholismo crónico
– Enfermedades neuromusculares graves
– Inmunosupresión (incluyendo las inmunodeficiencias primarias y la originada por la infección por VIH, por fármacos –incluyendo tratamiento con eculizumab-, en los receptores de trasplantes y déficit de complemento).
– Cáncer y hemopatías malignas
– Implante coclear o en espera del mismo
– Fístula de líquido cefalorraquídeo
– Enfermedad celíaca
– Enfermedad inflamatoria crónica
– Trastornos y enfermedades que conllevan disfunción cognitiva: síndrome de Down, demencias y otras. Se hará un especial énfasis en aquellas personas que precisen seguimiento médico periódico o que hayan sido hospitalizadas en el año precedente.
También las mujeres embarazadas en cualquier trimestre de gestación y mujeres durante el puerperio (hasta los 6 meses tras el parto y que no se hayan vacunado durante el embarazo en esta temporada 2022-2023); convivientes con personas con alto grado de inmunodepresión y trabajadores de centros sociosanitarios.
¿Quién se puede vacunar de la dosis de refuerzo del COVID?
Tal y como se explica en el documento aprobado por la comisión de Salud Pública el pasado 22 de septiembre Recomendaciones de vacunación frente a COVID-19 para el otoño en España, la infección reciente no es una contraindicación ni una precaución para la vacunación frente a COVID-19. “La dosis de recuerdo se administrará independientemente del número de dosis recibidas con anterioridad, al menos 5 meses desde la última dosis administrada. Además, se ha observado una mejor respuesta a la vacunación cuando se respeta un intervalo de tiempo entre la infección previa y la vacunación, por ello, en el caso de una infección reciente (con diagnóstico registrado) en personas de 80 y más años de edad, residentes en centros de mayores y personas con alto grado de inmunosupresión se recomienda la administración de la dosis de recuerdo respetando un periodo de 3 meses tras la infección”.