(Por Olivia Abad)
Este pasado sábado, 22 de agosto, se celebró en Préjano un nuevo concierto organizado por “La Casa del Burro”. En esta ocasión pudimos deleitar nuestros oídos con parte del último trabajo de Luis Pastor, “La paloma de Picasso”.
Dentro de este verano atípico, Luis Fernández no ha dejado de acercar la cultura musical a nuestras tierras pese a todas las restricciones sanitarias, que se ha cuidado mucho de seguir de forma estricta. Todo para que los músicos, que, junto con otros gremios de la cultura y el espectáculo, están siendo los más perjudicados debido a los rebrotes, puedan sobrevivir haciendo lo que mejor saben: despertar nuestras emociones dormidas.
La disposición de las sillas permitendo guardar las distancias de seguridad incluyéndose parejas de sillas para conviventes, la solicitud de acudir al evento media hora antes para mejorar el acceso al recinto de forma escalonada, los recordatorios antes y después del espectáculo por parte de los organizadores (“La Casa del Burro” junto con el Ayuntamiento de Préjano) de las medidas de seguridad e higiene; hicieron posible que éste pudiera ser uno de los eventos a los que con más seguridad hayamos podido asistir en este extraño estío.
“Sobre Luis Pastor no voy a decir nada, porque sería eterno”. Así nos presentaba el concierto Luis Fernádez, organizador, y, en esta ocasión, arreglista y productor del trabajo de Luis Pastor; con el que colaboró en alguna canción con su melódica. Y es cierto que no se puede decir mucho más que lo que ya encontramos en internet, sólo dedicarnos a sentir y admirar la sabiduría del “eterno cantautor” junto con los coros de su compañera Lourdes.
Sólo queda recordar que Luis Pastor dedicó el concierto a Piluca, vecina de Préjano y gran amiga, por la hospitalidad que siempre ofrece a todas las personas y artistas que acuden a su casa, siempre abierta a toda persona que la necesite.
¡Gracias Piluca!
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