La Guardia Civil en La Rioja ha alertado sobre el incremento de ciberestafas en las que los delincuentes utilizan programas de acceso remoto para sustraer ahorros de cuentas bancarias. En los últimos meses, catorce personas de La Rioja y Navarra han perdido un total de 270.000 euros debido a este tipo de delitos.
Modus operandi de los ciberdelincuentes
Los estafadores se hacen pasar por «brokers» o gestores de inversiones en trading. Captan a las víctimas a través de anuncios atractivos, mensajes directos o testimonios falsos que prometen altas ganancias. Una vez ganada la confianza, persuaden a las personas para instalar programas de acceso remoto bajo el pretexto de gestionar inversiones. Esto les permite tomar el control de dispositivos electrónicos y acceder a cuentas bancarias.
Las tácticas incluyen mostrar supuestas ganancias tras una inversión inicial de 250 euros en criptomonedas, para luego solicitar aportaciones mayores. Cuando logran el acceso total, los delincuentes manipulan las cuentas bancarias y cortan toda comunicación con las víctimas.
Impacto económico en La Rioja y Navarra
En estas comunidades, las víctimas tienen entre 34 y 73 años, y la mayoría presenta conocimientos limitados en informática. Las pérdidas económicas, que alcanzan los 270.000 euros, evidencian la sofisticación de los métodos empleados por los estafadores.
Recomendaciones de seguridad
La Guardia Civil aconseja:
– Desconfiar de ofertas de inversión con promesas de rendimientos rápidos.
– Evitar instalar programas en dispositivos por solicitud de desconocidos.
– Proteger dispositivos electrónicos con actualizaciones y software antivirus.
– No compartir datos confidenciales ni bancarios por internet o teléfono.
– Verificar la identidad de interlocutores sospechosos y, en caso de duda, contactar directamente con la entidad oficial.
Qué hacer si es víctima
Cambie sus contraseñas, informe al banco y solicite el bloqueo de operaciones fraudulentas. Denuncie el caso a la Guardia Civil, proporcionando todos los detalles disponibles para colaborar en la investigación.
Este tipo de estafas pone en evidencia la importancia de la concienciación y educación digital para proteger a la ciudadanía frente a crecientes amenazas cibernéticas.




