Eran muchos los que tristemente se frotaban las manos al ver el aspecto de los congregados alrededor del concierto durante la primera canción. Y es que es lamentable, pero real, que existen calagurritanos que celebran más las derrotas de la ciudad que sus victorias.
Sin embargo, el final de los fuegos y la resaca del chupinazo, poco a poco, fue llenando el recinto del concierto de uno de los grupos referentes de la movida madrileña que, además, supo reconvertirse en los últimos tiempos, para buscar un nuevo público que volviera a seguirlos.
Los “Hombres G” volvieron a congratular a su antiguo y nuevo público en su concierto de Calahorra. Cómo pro, es que sus canciones siguen fresca, como contra… no seremos desde este medio quienes califiquemos el lanzamiento a los artistas ropa interior ya que se califica por si mismo.
Gran concierto y algo más que avanzar socialmente, algo que se escapa a los organizadores y que la sociedad nos debe.
En cualquier caso, la respuesta del público, por lo complicado de la fecha, tardó en llegar pero llegó. Gran acierto y enhorabuena por seguir trabajando en el camino de mantener Calahorra en el mapa aunque, esta vez, las condiciones no fueran las más idóneas.
