La alcaldesa de Calahorra, Mónica Arceiz, ha abierto con un discurso cargado de simbolismo y emoción la XXIX edición de las Jornadas Gastronómicas de la Verdura, una cita que, como recordó, “es mucho más que un evento culinario: es la celebración de una identidad que hunde sus raíces en el pasado más remoto de la ciudad”.
Durante su intervención, Arceiz relató un paseo reciente hasta la desembocadura del Cidacos en el Ebro, un recorrido que sirvió como punto de partida para reivindicar el vínculo íntimo de Calahorra con el campo y su entorno natural. “Brillaba el sol y dos sonidos se percibían por encima del viento: el del agua y el de una azada. El sonido de la vida en el campo”, expresó.
La regidora subrayó que la agricultura forma parte inseparable de la identidad calagurritana. “Desde el Imperio Romano se han constatado labores de campo en Calahorra. Por eso, no es raro que muchas familias conserven un trocito de tierra para cultivar sus propias verduras”, indicó. Tomates, berzas, lechugas o alcachofas, dijo, “saben a campo, y son orgullo del paladar calagurritano”.
Calahorra y su historia agrícola están, según destacó, unidas por un hilo invisible pero firme que se extiende durante más de dos milenios. “Hoy, ese pequeño agricultor labra el mismo campo que cautivó a los primeros moradores. 21 siglos después, con el mismo amor”, remarcó.
Arceiz también quiso poner en valor el papel de los agricultores y cocineros locales, auténticos artífices de la transformación de la huerta calagurritana en un motor turístico. “Convertimos nuestras verduras en bandera. Lo hacemos en los comercios, en las asociaciones, en los colegios y en nuestras peñas. Porque el amor a la tierra se cultiva y se comparte”, añadió.
Las Jornadas de la Verdura, que este año ofrecen seis días de actividades, gastronomía y cultura, siguen posicionando a Calahorra como un referente del turismo agroalimentario en España. “Tenemos motivos para estar orgullosos, y lo estamos”, concluyó la alcaldesa.
La cita se ha consolidado como una de las más esperadas del calendario local y autonómico, ofreciendo experiencias que van más allá del plato.



